DESTRUCCION DEL PATRIMONIO CULTURAL

Para quienes nos identificamos con la protección y conservación de nuestro rico patrimonio cultural en general, y con la defensa de la zona arqueológica de Puruchuco en particular, nos resulta verdaderamente indignante leer las manifestaciones vertidas en esta nota publicada en el diario El Comercio el sábado 10 de setiembre. ¿Cómo es posible admitir que una autoridad, como el alcalde de Ate, se refiera tan descaradamente con relación a la amenaza de destrucción que se cierne sobre dicho recinto arqueológico aduciendo que “otros municipios han destrozado el legado cultural del país y nadie ha dicho nada”? ¿Es que acaso, como otros ya lo hicieron, eso le da derecho a él para borrar de nuestra historia nuestro legado cultural? Lo dicho por el señor Alcalde de Ate es típico de aquellos personajes que quieren excusar sus actos de corrupción y arbitrariedad.




Por otra parte, nos sorprende el nivel de cinismo al que pueden llegar algunos malos profesionales como el caso del ¿arquéologo? Lumbreras para justificar sus propios actos. ¿Cómo es que ahora se quiere presentar como un defensor del santuario de Puruchuco cuando fue él mismo quien dio la autorización para la ejecución del tajo? Él sabía perfectamente que el proyecto iba a destruir el espacio arqueológico y que había suficientes razones técnicas para evitar la obra. ¿Por qué la aprobó entonces? Lo cierto es que el señor Lumbreras admite que, renunciando a su rol de proteger nuestro patrimonio cultural y a su ética como “arqueólogo”, aceptó el proyecto porque “Andrade y Diez Canseco querían que se hiciera esta obra”. Lo que hace doblemente indignante su accionar.




Por último, también nos extraña el silencio cómplice que, con relación a este asunto, mantienen la Alcaldesa de Lima, Susana Villarán, y la Ministra de Cultura, Susana Baca, ambas damas por las que sentimos el mayor de los respetos, pero sobre las cuales no podemos dejar de lamentar que, al parecer, están optando por practicar el mutismo del cuestionado exalcalde Castañeda con relación a un tema tan importante como es la defensa de nuestro patrimonio cultural, parte fundamental de nuestra historia.




Puruchuco es un legado histórico de la mayor importancia para la memoria histórica de todos los peruanos y peruanas, pues allí se encuentran, sobre todo, los restos de nuestros valerosos antepasados que lucharon por defendernos de la invasión y esclavitud hispánica. Por ello, no permitiremos que sea destruido de ninguna manera, y mucho menos en nombre de una supuesta “modernidad” que, en realidad, lo único que busca es beneficiar a un centro comercial de capitales chilenos y –quién sabe- a algunos funcionarios corruptos que deben haber recibido ya su buena “aceitada” para avalar y promocionar este latrocinio.




COLECTIVO POR LA MADRE TIERRA

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